¿Es un te quiero o un te quise? Si duele, es que te importa o eso dice mucha gente. Siempre me ha gustado sonreír incluso a lo negativo, me gustaba poner la música alta hasta dejarme sin tímpanos, recorrer cada calle, mirar los rascacielos, mirar los álbumes de fotos, los recuerdos, el verano, los sueños, la ilusión, el batido de chocolate que tan bien te sentó, el tacón que rompiste en la fiesta, en la que te arreglaste más que en toda tu vida. En la boda de tu prima, de tu tía, el guiño de aquel tío que te molaba, el concierto en el que te quedaste afónica, el primer beso, como sonreías, sonreías sin parar, te apetecía hacerlo ¿Hoy?

Ahora se llevan más lo besos que las sonrisas; y yo no tengo besos ni sonrisas.